Tiempo sin Tiempo  (Residencia de Arte NAT - 04/2023)

La infancia es genuina creación. Curiosidad, capacidad de sorpresa y juego. Prueba- Error, equivocarse, empezar de nuevo y aventurarse en procesos sin poner expectativas en el resultado. Crear sin miedo, solo por el placer de hacer, sumergirse dentro del mundo lúdico, disfrutar con cuerpo y alma del momento de expresar. Fluir libremente. Divertirse.

Este viaje es un regalo para reconectar con esa niña artista que vive en mí. Estoy aquí para celebrarte. Ella me abrió la puerta, me guío a mis emociones y me recordó el camino de mi propio deseo.

La vida es hoy, demasiado breve para cargar con miedos ajenos que encarnamos como propios, para limitarnos, repetir historias, y sostener pesados obstáculos que nos paralizan.

Esta obra fue vibrar en la sintonía del juego, pintar, plegar, desplegar, calar, enrollar, dejar huella en cada objeto. Adentro, afuera, sin escondite posible, salir del molde, abrazar las imperfecciones. Es ahora, tengo la certeza de que ya es tiempo de volver a jugar.

Tiempo sin Tiempo (Instalación)

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Persistente Desborde (Acción site specific)

Paisaje interno. El Deseo persiste, se repite, permanece intacto, habita un espacio central, perdura inmóvil. Es una sensación de eterna circularidad donde la belleza se encuentra atrapada entre diferentes temporalidades. El deseo oculto se refugia entre las rígidas barreras que no le permiten encontrar su propio cauce.

Paisaje externo. La naturaleza es acción, movimiento, cambio. El vaivén del mar, la fuerza del viento, la arena tibia da el impulso vital para dejar salir al deseo de los bordes, atreverse a romper fronteras. Es una secuencia topológica, donde lo de adentro se precipita para expandirse y dejar desplegar hacia afuera su propia luz.

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